En la "meseta del Chubut" el clima es hostil, con un verano de calor tórrido y los inviernos con nieve y heladas. Los pocos habitantes se agrupan de diferentes maneras: cinco pequeños pueblos con una escuela, tres pueblos con una población de menos de 1.000 habitantes y siete comunidades con una población eminentemente mapuche. Es una etnia local que forma la mayor parte de la población de la 'meseta’, un pueblo orgulloso que regaló a la Familia Salesiana uno de los mejores ejemplos de santidad juvenil: Ceferino Namuncurá.
Los salesianos están presentes en la región desde los primeros años del '900. Durante este tiempo han desarrollado muchas iniciativas para el beneficio de los Mapuches. Se les ha ayudado a mejorar las técnicas en la crianza de ovejas, que constituye su principal fuente de sustento; llevan un proyecto de perforación y canalización del agua, en una zona donde el agua es escasa; se preocupan de la protección y de la defensa del medio ambiente, en una zona donde los recursos minerales son un gran interés para las multinacionales; y organizan cursos de formación profesional y actividades pastorales para adultos, jóvenes y niños en varias aldeas y campamentos.
Los salesianos viajan sin descanso para ayudar y principalmente para llevar la Palabra de Dios a todas las comunidades mapuches de la montaña, con una atención particular hacia la juventud y la infancia.
Hoy en día el referente salesiano es el P. Antonio Sánchez, quien además de guiar espiritualmente a la comunidad y trabajar por la promoción humana mapuche; también trabaja para preservar y valorizar su identidad.
Apoyan al trabajo de los salesianos y de la población Mapuche “Missioni Don Bosco” de Turín.