Padre Alphonse, ¿puede contarnos qué ocurrió durante su estadía en Kigali, Rwanda, que duró más de una semana?

Tuvimos dos eventos significativos. El primero tuvo lugar del 19 al 24 de febrero, cuando el Rector Mayor y los miembros del Consejo General se reunieron con los Superiores de las Inspectorías y Visitadurías de África y Madagascar y sus Consejos. El propósito de esta reunión fue reflexionar sobre el carisma en África, discutir las perspectivas de nuestra misión en la Región, abordar cuestiones relacionadas con las vocaciones y planificar cómo seguir educando y evangelizando a los jóvenes en los cuarenta y un países africanos donde estamos presentes.

Después de este evento, nos reunimos con los delegados de la Familia Salesiana del continente para profundizar en el espíritu de familia dentro de nuestras diferentes ramas. Como Hijos de Don Bosco, en nuestra familia tenemos muchas hermanas, Cooperadores, miembros de la Asociación de María Auxiliadora y de varios otros grupos. Fue una oportunidad valiosa para quienes coordinan la Familia Salesiana reunirse con el Delegado Central del Rector Mayor para este ámbito, comprometiéndose en la reflexión, la oración y la planificación colaborativa para un futuro de comunión, como familia, en línea con las enseñanzas actuales de la Iglesia.

¿Cómo valora la contribución de la Familia Salesiana en apoyar a los salesianos en su misión, especialmente en África?

Es evidente que su presencia desempeña un papel crucial. En África, es común ver a los salesianos llegar inicialmente solos o con las hermanas a la cabeza. Sin embargo, tan pronto como las otras ramas de la Familia Salesiana se enteran de su presencia en el territorio, a menudo se reúnen o fundan comunidades cercanas para encarnar colectivamente las diversas facetas del carisma salesiano.

El Rector Mayor ha enfatizado que la riqueza del carisma no se manifiesta completamente solo por los salesianos. La presencia de los grupos de hermanas salesianas agrega una dimensión materna a la misión, mientras que la participación de los Salesianos Cooperadores y los Exalumnos demuestra que el carisma puede vivirse en un contexto familiar, involucrando a individuos de todas las edades y procedencias.

Este enfoque inclusivo en África y en el mundo destaca la creencia de que hay un lugar para todos dentro de la Familia Salesiana. Ya sea un admirador de Don Bosco, un miembro consagrado, un laico, un Exalumno o un benefactor, cada uno tiene algo valioso que ofrecer para promover el bienestar de los jóvenes. Trabajando juntos en sus respectivas vocaciones, la Familia Salesiana se esfuerza por ofrecer a los jóvenes oportunidades de crecimiento y desarrollo dentro de una comunidad más amplia y solidaria.

Hay una creciente tendencia hacia el uso de la tecnología. ¿Discutieron este tema con la Familia Salesiana? ¿Cómo cree que la tecnología actual puede ser útil para las Inspectorías y Visitadurías en África?

Creo que este desafío tiene un impacto en el carisma salesiano en su conjunto, no solo en algún ámbito. Por ejemplo, el Padre Gildasio Mendes, Consejero General para las Comunicaciones Sociales, ha subrayado la importancia de introducir a los jóvenes y a los salesianos, especialmente a los miembros más jóvenes, en el uso de la tecnología y las habilidades de comunicación para una mejor difusión. Ha destacado la necesidad de involucrarse con los jóvenes en el mundo digital, donde están más activos, porque si no lo hacemos, corremos el riesgo de perder la conexión con ellos. Es fundamental para nosotros, como seguidores de Francisco de Sales, abrazar la comunicación social como un medio para llegar eficazmente a los demás. Un Consejero ha enfatizado que debemos priorizar, ser comunicadores, educadores y evangelizadores para transmitir eficazmente nuestras convicciones y valores, con la tecnología que sirve como herramienta útil para conectarnos con los jóvenes en el mundo moderno.

¿Cuáles serán los resultados de este encuentro para la Familia Salesiana?

El primer resultado que me viene a la mente es la conciencia de que realmente somos una familia, lo que nos impulsa a reconectarnos con nuestras raíces y redescubrir nuestra identidad. El concepto de identidad tiene un gran significado, porque define quiénes somos y qué representamos. Se subrayó el mensaje de la unidad en la diversidad, destacando el hecho de que cada individuo enriquece a la familia en su conjunto.

También se destacó que debemos planificar, actuar y evaluar juntos como una unidad cohesionada, en lugar de perseguir misiones o proyectos individuales. Esto está en línea con la visión de Don Bosco de una Familia Salesiana unida. Además, se reconoció la necesidad de un acompañamiento dentro de la familia, no solo para los jóvenes, sino también para todos los miembros. La formación y el apoyo son esenciales para que los individuos puedan prosperar y contribuir eficazmente.

Además, se discutió la idea de que cada grupo de la familia tiene una naturaleza misionera. Alentar a otros a unirse y compartir los valores y la misión de la Familia Salesiana es fundamental para su crecimiento y su impacto. Al igual que en el Evangelio, difundir el mensaje e invitar a otros a ser parte de la familia es esencial para su expansión y su éxito.

En última instancia, el encuentro ha destacado la importancia de la unidad, la identidad, el acompañamiento y la misión compartida dentro de la Familia Salesiana. Abrazando estos principios, podemos fortalecer nuestros lazos y seguir creciendo y prosperando juntos.

En conclusión, ¿cuántos miembros tiene la Familia Salesiana en África?

No tengo un número exacto. Solo sé que los Salesianos son dos mil cien en África y Madagascar. También las Hijas de María Auxiliadora son probablemente más de mil. Si también incluimos a nuestros Exalumnos, el número probablemente alcanza varios miles. Sin embargo, es difícil proporcionar una cifra exacta. Actualmente, el grupo más numeroso parece ser el de los exalumnos, pero lamentablemente muchos de ellos no se mantienen en contacto con nosotros. Esto lleva a una dispersión de energías y a una falta de unidad dentro de la Familia Salesiana. Es una lástima que no pueda proporcionar un número exacto, porque resalta una debilidad de nuestra organización. Si nos reunimos y nos unimos, tendríamos una mejor comprensión de nuestra fuerza colectiva y seríamos más efectivos en servir a nuestros jóvenes. Y a aquellos que se han alejado después de dejar los centros educativos salesianos, les pido que regresen, porque necesitamos la participación de todos. Cuantos más seamos juntos, más podremos contribuir al Reino, a nuestros países y a la Iglesia.

Ange de la Victoire Dusabemungu,

Miembro de Comunicación Social de AGL 

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