El diálogo fue moderado por Giovanni Anversa, periodista y autor televisivo, actualmente vicedirector de Entretenimiento Prime Time de la Rai, quien destacó la importancia de la presencia de muchas autoridades y personalidades, especialmente de varios movimientos y asociaciones, así como de los directores escolares de las instituciones locales.
Durante el evento, se presentó y profundizó en el recurso para educadores titulado "Una Pastoral Juvenil que Educa en el Amor", elaborado por Padre Miguel Ángel García Morcuende, Consejero General para la Pastoral Juvenil de la Congregación Salesiana, y la psicoterapeuta Antonella Sinagoga, miembro del Sector de Pastoral Juvenil.
El objetivo del documento es entregar a los jóvenes una visión positiva de la afectividad y la sexualidad, al tiempo que se busca comprender cómo se viven estos dos aspectos en el mundo juvenil. Es difícil decir si esta generación experimenta la sexualidad de manera mejor o peor que la anterior, pero no se debe caer en la tentación de decir que "cualquier pasado fue mejor".
Se subrayó cómo esta generación habita esta dimensión y se considera esto como punto de partida para más exploraciones y descubrimientos. Se observó que en las profundidades de la carne hay una soledad emocional, que es la falta de relaciones significativas, y una soledad social, es decir, la falta de relaciones afiliativas, que genera la sensación de no ser aceptados por los demás, cuando, en última instancia, lo que más importa en la existencia es el afecto y el reconocimiento. Esto puede lograrse a través del camino de la escucha.
El Padre García Morcuende presentó el proceso de sensibilización sobre el tema que involucró a toda la Congregación, la lectura del contexto actual, los nuevos campos de misión y los desafíos del educador que acompaña al joven en este ámbito, proponiendo, desde una perspectiva salesiana, diez criterios educativos.
Estos fueron presentados por la doctora Antonella Sinagoga: acompañar la construcción de la identidad; acompañar la conciencia y las decisiones; educar hacia el dominio de uno mismo; educar en los afectos: las virtudes del corazón; educar para la vida comunitaria; educar en la conciencia de los límites; educar en la conciencia del poder digital; acompañar la singularidad sin verla como motivo de exclusión; una ética básica de las relaciones afectivas; valorar dos áreas de impacto educativo: las familias y los compañeros. La Dra. Sinagoga anunció que para profundizar en los criterios educativos propuestos en este documento y fortalecer algunas habilidades sociales y personales, se presentarán itinerarios para promover una sólida práctica educativa-pastoral.
Luego intervino un jesuita experto, Padre Giovanni Piva, quien destacó la importancia de hablar de manera científica y cristiana sobre "identidad de género" y "orientación sexual", también ayudados por el texto propuesto, sin caer en las trampas de facciones ideológicas, ofreciendo un servicio significativo a los educadores de hoy. En la actualidad, en los grupos juveniles, ampliando la perspectiva a todo el contexto eclesial, hay jóvenes que, mucho más que en el pasado, tienen el coraje de expresar dudas e inseguridades sobre su identidad sexual; ayudados por un contexto social y eclesial más tranquilo en relación con estos temas. Por este motivo, se siente la urgencia de que estos temas entren con la misma serenidad en los itinerarios educativos de nuestros jóvenes, prestando mucha atención a no comunicar mensajes ambiguos o pedagógicamente negativos.
El evento fue concluido por un joven laico comprometido, Stefano Pescatore, quien coordina, junto con otra voluntaria, Chiara Panizzi, las actividades del grupo local en relación con estos temas desde hace un año.
Los asistentes, incluso después de la conclusión del evento, expresaron su interés y deseo de profundizar en estos temas en todos los contextos educativos, religiosos y civiles.
Padre Maurizio Verlezza
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