Un sismo de 6,8 grados en la escala de Richter (uno de los más fuertes de las últimas décadas) sacudió Marruecos, causando más de dos mil ochocientos muertos y más de cinco mil heridos. El epicentro se registró en el Alto Atlas, a unos 71 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech. Los equipos especializados, que llegaron rápidamente al lugar de los hechos, hablaron de una escena de devastación total, con carreteras bloqueadas y pueblos completamente destruidos. En la zona del epicentro, de hecho, muchas casas estaban construidas con métodos tradicionales del Alto Atlas, es decir, con ladrillos de barro, y se derrumbaron bajo los temblores del terremoto.
El sismo sumió a la población local en la desesperación y la frustración, sobre todo cuando se hizo cada vez más difícil rescatar a los supervivientes.
Por ello, los Salesianos de Portugal y Cabo Verde, a través de la Missão Dom Bosco, se implicaron inmediatamente para ayudar y apoyar los esfuerzos humanitarios. La intención es ayudar directamente sobre el terreno a la población afectada por el terremoto. Los donativos que reciban serán enviados al Cardenal Cristóbal López Romero, SDB, Arzobispo de Rabat, que los gestionará en sinergia con la Cáritas diocesana local. Todos los fondos recaudados se destinarán a prestar ayuda inmediata a las víctimas de esta catástrofe natural.
"Lo preocupante ahora son las víctimas, los numerosos heridos y los daños estructurales en los edificios, incluso en los pueblos pequeños", explicó el cardenal López Romero.
Se ha abierto una página especial en la web de los Salesianos de Portugal (https://www.salesianos.pt/missaodombosco/donativos/) con todas las indicaciones necesarias para contribuir, y con la dirección de correo electrónico (Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.) a la que se puede contactar para saber más.