El acto, moderado por Neria De Giovanni, directora editorial de "Nemapress", contó con la participación de personalidades del mundo de la cultura, el periodismo, la Iglesia y la Congregación. A continuación, los distintos ponentes tomaron la palabra y con sus intervenciones ilustraron la riqueza del libro del padre Costa, además de qué y cuántas aportaciones ha hecho el salesiano al periodismo católico en todos estos años.

El primero fue Massimo Milone, director de la RAI Vaticano, quien presentó el libro del salesiano como “un recorrido por 40 años de historia, periodismo, costumbres, Iglesia, sociedad; huele a Sicilia, a papel impreso, a cultura, a bienvenida salesiana y a mirada salesiana a los jóvenes”. Por eso, pasando de la obra a su autor, el conferencista lo definió como “maestro, sacerdote, comunicador, testigo, animador de relaciones y narrador de la realidad”. Refiriéndose al mensaje del Papa con motivo de la 56ª Jornada Mundial de las Comunicaciones, celebrada el domingo anterior, captó la metodología de padre Costa como “una búsqueda de la verdad que se desarrolla siempre a partir de la escucha”, y captó la figura específica en “la comunicación como servicio”. Finalmente, recordando sólo algunas de las muchas citas a las que ha asistido el padre Costa, ha observado que "se le han gastado las suelas de los zapatos como comunicador, y al Papa Francisco le gustaría mucho".

Posteriormente, intervino Cinthia Wooden, jefa de "Catholic News Service", citando varios aportes contenidos en el texto para resaltar algunos rasgos del periodismo de padre Costa: la intuición y la mirada profunda, "en busca de lo nuevo, pero también de lo que siendo nuevo tendrá impacto en los individuos y comunidades de la Iglesia”; además de la interpretación del papel cívico del periodista, que sabe “decir la verdad al poder en nombre del público y de los más pequeños”; sin olvidar, “el factor humano sumado a los hechos descarnados”; y la capacidad de mirar la realidad desde una perspectiva más amplia, como cuando, en el debate del Columbus Day, pudo observar que los derechos de las culturas originarias de América del Sur se estaban olvidando.

El vaticanista y redactor jefe del Tg2, Enzo Romeo, celebró del padre Costa tanto "la manera de proponer la verdad, nunca fundamentalista, pero siempre fraterna" como "la humanidad que siempre le ha distinguido", actitudes que se pueden leer a contraluz incluso en los artículos individuales, porque "detrás de los artículos está su vida, sus emociones y su fe". Luego, volviendo a la estructura del texto, dividido en secciones temáticas, el vaticanista observa: “Comienza con Don Bosco, luego con los jóvenes y los viajes. No es una simple lista de cosas que escribió, sino que encontramos lo que hay de más profundo en su persona”.

"Pasión, fidelidad y generosidad" son en cambio los tres rasgos distintivos de la actividad periodística y educativa de padre Costa destacados por Vania De Luca, redactora vaticana de TG3. “He visto en este libro un camino coherente”, añadió, vislumbrando un hilo conductor entre las decenas de piezas relatadas en el libro precisamente en el enfoque ético y cívico del periodismo, enfoque que nunca ha cambiado por parte del salesiano, pero que siempre ha madurado más, desde las primeras experiencias en el periódico escolar hasta los puestos más prestigiosos del mundo editorial.

Luego, con un rápido discurso, Gianni Cardinale, experto vaticano de Avvenire, primero definió el libro como “un merecido homenaje a la vida y testimonio de padre Giuseppe”, que recoge “información preciosa, que no se puede encontrar navegando”; luego observó que el aporte del padre Costa al periodismo -al celebrar estos primeros 40 años- aún continúa y se mantiene vivo y activo; finalmente, también felicitó a la editorial por la calidad de la maquetación del texto, útil también como fuente de consulta para los actuales y futuros profesionales de la información.

Para concluir, intervino el autor del libro, padre Giuseppe Costa, quien agradeció el testimonio de todos los presentes y ofreció alguna nueva reflexión a partir de sus décadas de experiencia periodística: "Agradezco al mundo periodístico católico por las grandes amistades que me ha dado”, dijo Don Costa, antes de recordar brevemente varios episodios y circunstancias compartidas con muchos de los presentes o con otros profesionales del sector o personalidades eclesiásticas.

 Luego, casi como conclusión, agregó: “Debemos tener respeto por esta profesión, porque el periodista es portador de atención y pasión… Vivir el periódico con pasión es uno de los aportes fundamentales del periodismo católico en el interior del mundo católico”.

Entre las numerosas personalidades presentes en el acto señalamos a: Antonio Cossu, Director de la Biblioteca de la Cámara de Diputados; la poeta Antonella Pagano, madrina del Premio Internacional “Don Tonino Bello”; el padre Giuseppe Merula, miembro de la Comisión del Jubileo Vaticano; Manuela Tulli, Periodista de ANSA; Stefano Girotti Periodista de la RAI; Gjon Kolndrekaj, Director y Productor de Cine; Giovanni Tonti, Periodista; el padre Gildasio Mendes, SDB, Consejero General para la Comunicación Social; Giuseppe Ruta, Vicario de la Visitaduría de la Universidad Pontificia Salesiana, junto al P. Tadeuz Lewicki; y Sylvia Irrazabal, Agregada Cultural de la Embajada de Uruguay en Italia.

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