El primer día de la visita comenzó con una celebración eucarística con la comunidad religiosa salesiana. Con los salesianos el Sr. Muller también pudo posteriormente tener un momento de diálogo. Entre otras ideas les compartió su mirada sobre los desafíos que enfrenta la presencia salesiana de Tijuana. Entre las profundas problemáticas que esta ciudad enfrenta está el drama de la movilidad humana. Miles de inmigrantes se concentran en Tijuana buscando alcanzar el llamado “sueño americano” o enfrentando el haber sido rechazados en su intento por cruzar hacia Estados Unidos. Con frecuencia y facilidad estas personas pasan del ver cómo se esfuman sus sueños de una vida mejor a la mendicidad y con frecuencia a perderse en el consumo y dependencia de sustancias.
En esta misma primera jornada, el Ecónomo general de los salesianos pudo conocer, acompañado por el P. Agustín Novoa, director de la comunidad salesiana local, la amplitud y variedad de servicios ofrecidos en distintas zonas de la ciudad por los salesianos. Dada esta misma amplitud y extensión, en esta ocasión el Sr. Muller pudo conocer sólo una parte de las obras: El desayunador salesiano “Padre Chava”, donde diariamente se ofrece comida caliente a alrededor de un millar de personas, sobre todo migrantes, además del oratorio San Francisco de Sales, el oratorio Domingo Savio y el oratorio Don Bosco, que cuenta también con colegio y un centro de acogida (refugio) para personas con estatus de refugiados, específicamente mujeres y niños.
La visita ha permitido al Sr. Jean Paul Muller acercarse a la realidad que viven tantas personas en situación de pobreza y marginación en esta frontera que en situación normal, previo a la pandemia, registraba el mayor flujo de personas entre dos países, aproximadamente 7 millones 300 mil personas que realizan el cruce trasnacional a pie anualmente y 25 millones y medio de coches, también cada año. Durante 19 meses la frontera permaneció cerrada del lado estadounidense para viajes considerados como no esenciales, esto debido a las resticciones sanitarias. Esto ha ocasionado mayores dificultades para la población que depende de alguna manera de la economía fronteriza. La frontera se abrió el lunes 7.
El Sr. Jean Paul Muller continuó su visita a la inspectoría dirigiéndose el mismo lunes 7 a Ciudad Juárez, otra ciudad fronteriza con problemáticas comunes con Tijuana y con otras propias.
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