¿Cuál es su sueño para la misión compartida entre los Salesianos, los laicos y los jóvenes?
Recuerdo el momento en que Don Bosco le dijo a Don Rúa: “Te doy la mitad de lo que tengo. De ahora en adelante, tú y yo compartiremos todo en la vida”. Me conmueve profundamente cómo Don Bosco depositó su confianza en un joven en el inicio de la Congregación Salesiana. Don Bosco compartió responsabilidades con sus jóvenes, haciéndolos protagonistas de su trabajo misionero. También quiero subrayar la humildad de Don Bosco al buscar la ayuda de los laicos, especialmente de su madre, Mamá Margarita, implicándolos en el desarrollo de la misión salesiana. Este es mi sueño cuando hablamos de la misión compartida entre los Salesianos, los laicos y los jóvenes: debemos conservar la cultura de la confianza y la humildad para pedir ayuda cuando no podemos hacerlo solos.
¿Qué quieres de la comunidad Salesiana?
Mi deseo para cada salesiano es que vivan con sencillez, que tengan un auténtico amor por los pobres, que puedan llevar el amor de Dios a los jóvenes y que puedan cuidar de sus hermanos, protegiéndose unos a otros.
¿Cómo se sintió cuando visitó los lugares de Don Bosco como I Becchi, Chieri y Valdocco?
Se sentía surrealista. Nunca imaginé que podría tocar el corazón de las misiones salesianas. Mi corazón lloraba de alegría y estaba lleno de auténtica felicidad y desbordante de gratitud. Estaba feliz de aprender nuevas historias que no conocía y sentía que quería saber más y más sobre Don Bosco y sus obras. Muchos sentimientos surgieron durante nuestra visita a los lugares santos de Don Bosco, pero de una cosa estaba seguro: pensé en todos los jóvenes salesianos y sus familias, soñé y recé para que también ellos tuvieran la oportunidad de visitar y vivir las raíces de nuestra historia salesiana.
¿Qué puede decir de su experiencia conversando con los Delegados del CG28?
Fue un honor y un privilegio poder hablar con los delegados, comunicándose con ellos incluso fuera de sus oficinas, desafiando las barreras del idioma. Hablar con ellos me hizo sentir conectado con las misiones salesianas en todo el mundo. Ahora espero que lo que han planeado para los próximos 6 años no quede solo por escrito, sino que se experimente en las Inspectorías y en las comunidades locales.