Como es sabido, en Haití, la mayoría de las actividades han quedado paralizadas desde el 16 de septiembre. En su mayor parte, el transporte público, las actividades comerciales y las escuelas no funcionan en Puerto Príncipe ni en las provincias. En varios puntos se levantan barricadas con neumáticos en llamas.
En La Saline, un barrio marginal muy poblado al norte de Puerto Príncipe, donde se encuentra la primera casa salesiana, la situación es muy dramática. Las bandas armadas se enfrentan todo el día. Los Salesianos viven en una situación de estrés y miedo porque ellos se encuentran al centro de estos enfrentamientos.
Desde 1936 la presencia de los Salesianos en La Saline ha sido notable, trabajando con tres grandes obras: Escuela Nacional de Artes y Oficios (ENAM); Pequeñas Escuelas del Padre Bonen (OPEPB); “Foyer Lakay”, una casa para niños y jóvenes en dificultad. Cada día se recibe a unos 4.000 niños y jóvenes.
