En una multitudinaria conferencia de prensa, a la que asistieron también el Inspector de los Salesianos de Hungría, P. Abrahám Béla, y varios especialistas científicos y forenses implicados en el trabajo de búsqueda e identificación de las reliquias, el P. Cameroni comenzó recordando que el Papa Francisco había declarado mártir a Esteban Sándor exactamente hace seis años, el 27 de marzo de 2013. "Por lo tanto, existe esta feliz coincidencia entre su martirio y el hallazgo de sus reliquias", señaló.
A continuación explicó cómo el reciente descubrimiento “no es en sí mismo una novedad en la historia de la Iglesia, pues en la antigüedad se encontraron las reliquias de los mártires, incluso décadas y siglos después. Estamos en una historia que continúa”.
Y después de agradecer a la Inspectoría Salesiana de Hungría y a todas las autoridades civiles, a los médicos, a los científicos que “acompañaron este proceso con mucho cuidado y profesionalidad”, el Postulador General invitó a las autoridades públicas y al Centro Nacional de Expertos e Investigación a seguir apoyando la búsqueda de reliquias.
“Sobre esta base, nosotros, como Congregación y con la Santa Sede, podemos proceder desde el punto de vista canónico-jurídico-eclesial”, continuó el P. Cameroni, quien posteriormente ilustró todo el proceso al que se someterán ahora las reliquias.
En este sentido, también hizo saber que ya hay solicitudes para recibir las pequeñas porciones de las reliquias del Beato Sándor en diferentes partes del mundo, y que en un futuro próximo será necesario crear un relicario especial para permitir la veneración pública de las reliquias.