Este año por primera vez se sumó la fabricación de ladrillos de papel reciclado, también con destino a las familias que necesitan asistencia especial para la calefacción en esta época invernal. Para la confección de frazadas convocaron a toda la comunidad a participar y a regalar materia prima, en cuadrados de 20 por 20 centímetros, telas, lana o sábanas para realizar los forrados. El año pasado se logró realizar un total de 53 frazadas.
“Afrazados” tiene un tono particular este año, ya que le sumamos el proyecto de elaboración de ladrillos de papel para calentar los hogares de nuestros barrios”, dijo Ivonne Iralde, directora del Instituto Don Bosco. Además, mencionó que se contó con la colaboración de distintas instituciones en la recolección de papel, con el fin de “armar un equipo para hacer el taller, sumando a toda la población en este servicio solidario”.
Iralde mencionó que como “institución educativa y pastoral, esto tiene una gran transmisión de valores, porque transmite el valor evangélico supremo que es el servicio al prójimo y también el de compartir un rato en familia”.
En tanto, Marcela Merino, directora de nivel Inicial y Primario del Instituto Don Bosco, explicó: “Hace seis años que nos juntamos como comunidad a tejer frazadas”
“Hacemos frazadas pequeñas para bebés, para niños, con una medida máxima de plaza y media aproximadamente. Y tenemos dos destinatarios fijos: la comunidad de Rawson, para quienes necesitan, las acercamos mediante alguna institución; y nuestros hermanos de la Meseta. Cuando los salesianos hacen sus misiones, en Lagunita Salada, Chacay Oeste o cualquier sector de la zona, mandamos frazadas como regalo para hermanarnos”, explicó.
