Ni los cientos de muertos y otros tantos miles que sufren, abre el corazón del presidente Ortega porque “hemos sido testigos de la falta de voluntad política del gobierno para dialogar sinceramente”, afirman los obispos de Nicaragua.
En la misa dominical en la catedral de Tegucigalpa, el Cardenal Rodríguez señaló que en Nicaragua el poder quiere callar la voz de la verdad y la justicia, y que por esa razón se debe “ayudar a quienes están resistiendo con la fe” en ese país.
Abogó para que se inicie un diálogo nacional y que ponga fin a la crisis postelectoral derivada por un presunto fraude en las elecciones generales de 2017. Para buscar una salida a la crisis, en marzo pasado se inició un proceso denominado "prediálogo", con la moderación del representante de las Naciones Unidas en Tegucigalpa, Igor Garafulic, orientado a llegar al diálogo.
“El diálogo es el camino, dejémonos de prediálogos, se ve ridículo eso, es el momento en que debemos echar el enemigo, liberar a nuestro pueblo para que verdaderamente lleguemos a entendernos como hermanos", subrayó el Cardenal Rodríguez.
El religioso también abogó para que los políticos hondureños entiendan que deben buscar el bien común y no encerrarse en posturas egoístas que no llevan a nada.
Por otra parte, los Obispos Nicaragüenses que hace poco sufrieron maltratos físicos por parte de adeptos al gobierno, enviaron un mensaje Pastoral. “En los últimos días se ha recrudecido la represión y la violencia por parte de los paramilitares pro-gubernamentales hacia las personas que protestan cívicamente. Lamentamos profundamente tanta muerte, dolor y sufrimiento de nuestro pueblo”.
Los Obispos piden unirse a acciones concretas con el fin de buscar la paz. “Urgimos a los fieles católicos y a los hombres y mujeres de buena voluntad a unirse a nosotros en: un día de ayuno (viernes 20 de julio) en acto de desagravio por las profanaciones realizadas estos últimos meses contra Dios. Un mes de intercesión (del 15 de julio al 15 de agosto)”.
Concluyen manifestando que “el mal tiene fuerza cuando nosotros se lo permitimos” e invitan con fuerza a que “no seamos cómplices del mal”.
Fuente: Religión Digital