A las 15:30 el Padre Fabrizio Contini, capellán, bendijo el cuadro de la Sierva de Dios, seguido por el testimonio enriquecedor de la pintora que lo ejecutó; la recitación del Rosario y la adoración eucarística preparada por la Asociación “Opera dei Tabernacoli Viventi” – que se inspira y promueve la espiritualidad de Vera Grita – marcaron un momento fuerte de oración e intercesión por los enfermos y por la humanidad sufriente.
La Eucaristía fue presidida por el Padre Pierluigi Cameroni, Postulador General de las Causas de los Santos de la Familia Salesiana y también de la Causa de Vera Grita, quien en la homilía recordó cómo ella vivió su llamada con humildad, dulzura y magnanimidad, y cumplió con fidelidad la misión recibida de Dios.
El evento, promovido por la Fundación Vera Grita y el Padre Gabriello Zucconi SDB, y por la Capellanía de la Santa Corona, contó con la participación de varios representantes de los grupos de la Asociación Opera dei Tabernacoli Viventi, de algunos Salesianos Cooperadores de Liguria, de varias Hijas de María Auxiliadora, además de numerosos devotos de la Sierva de Dios Vera Grita.
“En esta iglesia Vera Grita participaba en la Misa y acudía a rezar durante sus largas hospitalizaciones – recordaron la presidenta de la Fundación, Maria Rita Scrimieri, y el capellán Padre Fabrizio Contini –. Su testimonio de fe en la presencia viva de Jesús Eucaristía y de la Virgen María en su breve vida terrena, pueda ser un signo de esperanza y consuelo, para quienes en este lugar de cuidado pedirán su ayuda y su intercesión ante el Señor para ser aliviados y liberados del sufrimiento”.
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