La campaña se extendió desde el 16 hasta el 29 de octubre y se dirigió especialmente a los jóvenes y adultos jóvenes que luchan por la construcción de una carrera profesional, que no tienen el tiempo para pararse un momento y reflexionar sobre el sentido de la vida. Ha servido para animar y tratar de orientar la misión en la vida y hacer que participen en las misiones y en las regiones más pobres del mundo.
Esta campaña ha sido difunda a través de la radio, del Internet y de la Prensa... y también por medio de la televisión comercial que presentó el trabajo de los misioneros y laicos voluntarios comprometidos a ayudar a los más pobres. También ha llegado a las redes sociales - Facebook, Twitter, YouTube y Snapchat - y se han compartido los materiales a través de hastag #mission.
Se presenta la historia de Patricia, quien descubrió su misión en Zambia: “Mi misión ha ayudado a encontrar mi pasión, que es la de trabajar con los niños. Los niños son la criatura más linda bajo el sol. Soy un fisioterapeuta, pero al volver de la misión empecé a buscar un trabajo en un jardín de infancia y encontré uno en una hermosa guardería, donde hoy trabajo. Hago lo que me gusta y eso es lo que me hace sentir bien”.
“Mi misión ahora es en primer lugar, mi familia” ha compartido Anna, que ha trabajado en Perú con el Voluntario Internacional Don Bosco. Ahora se encuentra casado y a la espera de un hijo, después de que el voluntariado misionero hizo que dudara si continuar sus estudios en Derecho. “Hoy en día, después de 4 años de trabajo en la oficina, hablando con personas indefensas, siento su gratitud al ver el alivio en sus rostros. Creo que también ayude a estas personas de esta manera y creo que es mi misión”.
Más información está disponible en: www.misjesalezjanie.pl