La Declaración Universal de Derechos Humanos proclama los derechos inalienables que corresponden a todos como seres humanos, independientemente de raza, religión, sexo, idioma, opinión política u otra índole, origen nacional o social, propiedad, nacimiento u otro estado.
A través de la educación y la promoción social, los salesianos y los miembros de la Familia Salesiana trabajan en alrededor de 5500 instituciones educativas en más de ciento treinta países del mundo, asegurándose de que todos los jóvenes conozcan sus derechos, puedan participar plenamente en sus comunidades y hagan oír su voz.
"El Padre Timothy Ploch, Director interino de 'Salesian Missions', la Procura Misionera salesiana con sede en New Rochelle, declaró que entre los numerosos programas educativos, los salesianos también ofrecen una educación en derechos humanos que brinda a los jóvenes vulnerables un sentido de dignidad personal y autoestima. En las escuelas salesianas, los niños reciben educación, aprenden sobre sus derechos y libertades, y participan en deportes y otras actividades formativas, todo en un ambiente seguro que fomenta el aprendizaje y el crecimiento".
Por ejemplo, en Perú, los salesianos llevan a cabo numerosos proyectos educativos y de desarrollo, y casi 1400 personas son solo aquellas que se han beneficiado de una donación de varias herramientas por parte de la organización "ASAP - Tools for Empowerment" recogida por "Salesian Missions". El año pasado, la "Fundación Don Bosco" de Perú recibió una donación de varias herramientas y la distribuyó a siete organizaciones salesianas. Las herramientas y equipos donados se utilizaron principalmente por los alumnos de los centros de formación técnica, pero una parte de los materiales consistió en equipos deportivos para los jóvenes migrantes venezolanos alojados en el centro de acogida salesiano de Magdalena del Mar. Formación profesional y deporte: dos medios diferentes, pero ambos válidos, para proteger los derechos de los menores.
El acceso a la alimentación también es uno de los derechos inalienables de la persona: los salesianos lo saben y hacen todo lo posible para hacerlo respetar. En Gatenga, Rwanda, por ejemplo, los Hijos de Don Bosco se ocupan de ofrecer comida a los alumnos de sus escuelas, para quienes las comidas de los salesianos a menudo son la única comida segura del día. Y "Salesian Missions", por su parte, garantizó la compra de alimentos para el desayuno, el almuerzo y la cena en la Escuela Técnica Don Bosco durante tres meses de este año (de enero a marzo).
Asimismo, en Sierra Leona, la atención de los salesianos al respeto de los derechos de los menores abarca los aspectos educativos, alimentarios y del derecho a la vestimenta. La Escuela Agrícola Secundaria Inferior "St. Augustine" de Lungi, fundada en 1984 y con catorce aulas, ofrece educación integral a los estudiantes marginados de la región. Actualmente, cuenta con setecientos estudiantes, treinta y cuatro maestros y cuatro miembros del personal auxiliar, incluida una enfermera. Dadas las condiciones económicas del país y los desafíos enfrentados por los estudiantes, "Salesian Missions" brindó su apoyo a la administración de la escuela, lo que le permitió garantizar a los estudiantes necesitados el acceso a una alimentación saludable a través del servicio de comedor escolar. Además, los fondos permitieron la compra de uniformes escolares y equipo deportivo, respaldaron los salarios del personal auxiliar y realizaron una serie de trabajos de mantenimiento y reparación de las instalaciones del instituto.