Luego de décadas de inacción, el país parece haber abandonado la anterior política de autarquía -que llevó al país a rechazar cualquier ayuda de organizaciones e inversionistas extranjeros- para intentar poner en marcha el desarrollo, de manera similar a lo que está sucediendo en los vecinos Ruanda y Uganda. "Ahora hay intercambios, la situación también está mejorando aquí", explica el padre Ndayikengurutse, quien también subraya el hecho de que la migración de burundianos a Europa es un fenómeno irrelevante a diferencia de otros países de esa parte de África. “Hay oportunidades para vivir con un nivel decente. El suelo es fértil y permite una buena agricultura”.
Los salesianos de Burundi están presentes hoy con tres obras erigidas canónicamente: en Bujumbura, Ngozi y Rukago. Las tres comunidades gestionan dos parroquias -con la de Rukago que cuenta con unos 70 mil fieles, de los cuales la mitad son jóvenes- y dos "escuelas profesionales" además del "Liceo Don Bosco", en Ngozi, una de los más grandes del país, que educa cada año a unos 900 alumnos, entre niños y niñas.
No es fácil ofrecer calidad, pero el gobierno hace aportaciones que permiten pagar los sueldos a los profesores: una mitad la pagan los salesianos, la otra mitad es con fondos públicos.
Luego está el servicio a los niños de la calle, que no se configura como una hospedaje en las estructuras sino como un encuentro y acompañamiento para el regreso a sus familias de origen. “Estos niños abandonan sus hogares por hambre o por la separación de sus padres”; los operadores intervienen en la emergencia y luego reconstruyen la red de relaciones para que cada niño o joven pueda volver a formar parte de la unidad familiar apoyándola. "Hay una diferencia entre lo que podemos hacer en las grandes ciudades o en las aldeas, pero la línea guía es reunirnos con los niños con regularidad para que regresen a su casa".
Mirando hacia el futuro, el padre Ndayikengurutse espera que los proyectos reservados puedan reiniciarse, erigir nuevas parroquias en beneficio de la evangelización, la catequesis y la difusión de los sacramentos entre los burundianos, y desarrollar el santuario joven "María Auxiliadora" en Bujumbura. para que se convierta en un centro de vida espiritual de la nación.
Para obtener más información, visite el sitio web: www.missionidonbosco.org