El 16 de abril, un fuerte terremoto sacudió la costa oeste de Ecuador y miles de personas fueron afectadas, según la ONU. Según los datos oficiales, unas 73.000 personas han sido desplazadas a consecuencia del terremoto, y están viviendo en albergues y campos organizados, con familias de acogida, o en asentamientos espontáneos. Más de 30.000 personas están alojadas actualmente en centros colectivos, donde los mecanismos de protección y las estrategias de cuidado necesitan ser reforzados para minimizar el riesgo de violencia así como para reducir la creciente ansiedad entre los desplazados.
El número de muertos por el terremoto de magnitud 7.8 grados en la escala Richter llegó a 658, mientras que los heridos superan 27.000, según los últimos datos oficiales. En la actualidad, 350.000 personas que solicitan ayuda. El fuerte terremoto destruyó 7.000 edificios y otros 2.740 se vieron afectados, incluyendo 281 escuelas, razón por la cual han quedado 120.000 niños y adolescentes sin clases. Además, 29.000 personas viven en 103 albergues temporales.
El P. Nivaldo Pessinatti en su carta a la Familia Salesiana Salesianos dejó clara la importancia de hacer un gesto concreto y un gesto de solidaridad en apoyo a nuestros hermanos en ese país: “nuestra Familia Salesiana de Ecuador sirve directamente a más de 7.000 personas sin hogar. En este momento, pido que todas las comunidades se movilicen en vista de una fuerte campaña en apoyo de estas personas sin hogar. Estudiantes, familias, profesores, educadores, feligreses, AJS, alumnos, ADMA, Cooperadores Salesianos. ¡Somos muchos! Nosotros expresamos nuestra solidaridad concreta, también como Familia Salesiana”.
Los Salesianos en el Ecuador, están ayudando en la reconstrucción del país y de la zona. Deben reconstruir por completo el “Colegio San José”, que es una escuela salesiana que sirve a más de 1.700 estudiantes de bajos ingresos. La escuela se vio fuertemente afectada por el terremoto y tuvo que ser demolido y tendrá que reconstruirse el edificio por completo.