El curso de formación “Cagliero” destinado a los voluntarios misioneros salesianos checos, organizado por la asociación inspectorial de animación misionera y de voluntariado “SADBA” (Salesianska Asociace Dona Boska), ya había perdido una primera cita en octubre debido a la pandemia. Así para no perder otro fin de semana, se cambió la táctica y la formación prevista para el 20-22 de noviembre se realizó online.

Nos cuenta Nelca, una joven ex voluntaria y miembro del equipo: “El padre Jaroslav Fogl, salesiano y Delegado para la animación misionera de la Inspectoría de la República Checa, ha preparado casi un estudio profesional en la oficina de SADBA.  Helena Janikova, coordinadora de Cagliero lo ha examinado con su ojo experto y ha añadido algunos paños de color y jirafas de madera para crear allí la justa atmósfera misionera”.

El viernes por la tarde después de una presentación más bien tímida de los participantes y del programa del curso, el equipo “Cagliero” tenía dudas sobre cuántos se conectarían el día después. Se han quedado sorprendidos el sábado por la mañana al ver que todos habían vuelto. No solamente los voluntarios en preparación, sino también los ex voluntarios.

La teoría fue alternada por prácticas de voluntariado, así aunque todos estaban sentados en sus cuartos, gracias a las fotos y videos entraron en la realidad de Papúa Nueva Guinea, India, Bulgaria, Ecuador, México, Zambia, Kenya, Tanzania y República Democrática del Congo. En los grupos se ha reflexionado sobre quién es verdaderamente y qué caracteriza a un “voluntario misionero salesiano” y han conocido mejor la estructura de la Familia Salesiana.

Los voluntarios, además, tuvieron que presentar su ambiente circunstante y se pusieron en juego gracias a los estímulos del equipo organizador que los ha invitado. Por ejemplo debieron mostrar el alimento más picante que tenían e su casa o algo que seguramente no habrían encontrado en Ecuador.

Después del encuentro, Helena Janikova, compartió sus impresiones: “A pesar de la timidez y la inseguridad inicial, hemos descubierto que es posible recrear, al menos parcialmente, la atmósfera debida, a través de internet y hacerla llegar a las casas de los candidatos voluntarios.”

También los 23 participantes estuvieron contentos de la dinámica. Una de ellas, Ana, así evaluó la experiencia: “Espero en un mañana mejor, si bien me digo a mi misma que si hemos logrado crear una atmósfera rica de informaciones en este modo, un encuentro personal será seguramente un éxito”

Para los jóvenes voluntarios checos, la próxima cita que se espera sea en presencia, está prevista para diciembre.  “Al menos ahora todos sabemos que la preparación para el servicio misionero y el acompañamiento procederá bien, en cualquier circunstancia” concluyeron los responsables del equipo de formación.

SADBA-Team

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