A partir de este momento, con las cartas de Don Bosco, se debe necesariamente re-escribir la vida de Don Bosco, para comprender mejor su método de educación y profundizar su espiritualidad.
La correspondencia con las autoridades civiles y religiosas es también una ventana abierta a la sociedad del siglo XIX con diversos temas como: el “Risorgimento”, el conflicto entre Iglesia y Estado, la respuesta católica al secularismo galopante, la educación popular y la juventud, la escuela y el tema educativo en la transición del dialecto.
Si los políticos de la época hicieron Italia, Don Bosco dio su contribución al desarrollo de la Italia y de los italianos. Las cartas del santo atraviesa las fronteras nacionales, llegan a Francia y España, y recorren hasta América Latina, como consecuencia del lanzamiento misionero de la Iglesia de la época. La gran masa de italianos que emigraron a Argentina y las misiones en la Patagonia, atraviesan el horizonte de referencia de las cartas de Don Bosco. Se puede afirmar que existen cartas hacia el Presidente de la República, a las autoridades religiosas del país, y por supuesto a las decenas de jóvenes y los entusiastas misioneros salesianos que fueron enviados para salvar “cuerpo y alma” de los habitantes del “fin del mundo”, en palabras del Papa Francisco.
El 22 de mayo de 2017, la obra salesiana de Salerno, acogerá la mesa redonda, con la presencia de profesores de varias universidades del sur de Italia.