El grupo fue recibido el 6 de noviembre pasado por el obispo titular del lugar, Mons. Samson Shukardin, feliz de ver que a su invitación correspondieron acciones concretas. En el cordial coloquio el prelado ilustró a los hijos espirituales de Don Bosco, la realidad de la diócesis, que incluye 16 parroquias - la mitad de ellas empeñada con comunidades tribales - y que cuenta con la presencia de cuatro congregaciones religiosas. Al mismo tiempo les ha explicado el motivo por el cual quiso invitar a los salesianos: el deseo de crear un centro de formación técnica, con un internado anexo, para responder al desafío de la desocupación juvenil, especialmente entre las minorías y para reforzar la formación religiosa de los jóvenes.
En Hyderabad, explicó el obispo, hay muchas comunidades tribales muy pobres y el único modo para romper el ciclo de la pobreza, que se sucede de generación en generación, es el de dar a los jóvenes las competencias necesarias para lograr realizar un trabajo digno. Contrariamente, sin competencias técnicas específicas terminan trabajando como esclavos, privados de sus derechos humanos y con retribuciones mínimas.
El contexto social de la diócesis ve una gran mayoría musulmana (94% del total), seguido por una minoría hindú (5%), y por los cristianos que son una minúscula minoría (0,2%, unos 50 mil en una población de 23 millones). La convivencia religiosa es entretanto pacífica y en los últimos años no se verificaron atentados de carácter religioso.
Desde el punto de vista educativo, hay 20 escuelas superiores y 35 colegios privados, en cambio los colegios públicos son 26 y los institutos estatales 9. Pero para los jóvenes la vida es difícil, afligidos por la pobreza difusa, desocupación crónica, dependencia de estupefacientes y escasas oportunidades del diversión. Y en las áreas rurales es aún peor...
Después de haber evaluado con el obispo algunos aspectos concretos - individuar el terreno en el que se quiere construir, la participación a los gastos...- el equipo realizó una inspección en diversas áreas de la ciudad y en los pueblos aledaños. Hasta el momento no se ha individuado una área libre y compatible con las exigencias del posible centro de estudios, si bien la comunidad salesiana está convencida de la impelente necesidad en las diócesis de dar competencias técnicas a los jóvenes, para que puedan liberarse del trabajo forzado y de la pobreza.
"Seguimos buscando un terreno adapto y confiamos a María Auxiliadora este sueño de una posible tercera presencia salesiana en Paquistán, mientras pedimos oraciones para realizar un buen discernimiento y para obtener la disponibilidad de salesianos y laicos colaboradores en la misión", declaró al concluir, el señor sig. Alex Abelgas, SDB.