Un balance final de los 15 meses del proyecto se esbozó durante el evento que se realizó el viernes 17 de septiembre en la terraza del "Hotel Etico", una estructura hotelera en el centro de Roma que en su misión también incluye dar formación y la inserción de personas con diferentes tipos de discapacidad.
Una oportunidad de encuentro e intercambio a la que también asistieron el padre Gildásio Mendes dos Santos, Consejero de Comunicación Social de la Congregación Salesiana y el padre George Menamparampil, Coordinador de la red "Don Bosco Solidaridad - Covid-19" para la coordinación global de los salesianos ante la emergencia pandémica. El proyecto, de hecho, es parte de la acción más amplia que los salesianos están realizando en todo el mundo para responder a la emergencia Covid-19 a través de una acción sinérgica global.
La velada fue inaugurada por Daniel Ross, Asesor de Asuntos Económicos de la Embajada de Estados Unidos en Roma, quien explicó que Washington ha comprometido 50 millones de dólares para apoyar la seguridad sanitaria italiana, la sociedad civil y el sector privado. Un apoyo que tiene como objetivo ayudar a la población italiana a reducir el riesgo de propagación de la infección.
En la velada estuvieron presentes representantes de las organizaciones que participaron, entre ellos el padre Francesco Preite, presidente de “Salesiani per il Sociale Aps”; el padre Fabrizio Bonalume, Director General de “CNOS FAP”; y Nico Lotta, presidente del “VIS”, ente rector del proyecto. Finalmente, Patricia Salgado-Hernández, de la oficina de programas internacionales de "Salesian Missions USA", habló desde Nueva York.
En cada una de las intervenciones se hizo un balance de las acciones realizadas, que llegaron a 776 docentes y jóvenes que participaron en los cursos de formación, 450 alumnos que recibieron PC y tabletas, 249 clases que se sumaron a las actividades de apoyo educativo, 30 centros de hospedaje de menores que recibieron equipos de higiene y protección personal y 1.317 personas que se beneficiaron de los vales de compra. Además, se han activado mostradores de apoyo psicológico en Sicilia y se ha hospedado a los jóvenes migrantes del África subsahariana.
“El Covid-19 ha trastornado nuestras vidas y nuestra cotidianidad -dijo el presidente de VIS, Nico Lotta-. Gracias a proyectos como el financiado por 'USAID' hemos podido rediseñar nuestras intervenciones poniendo un foco particular en Italia, uno de los países más afectados. Este proyecto demuestra que la cooperación internacional irá cada vez más hacia la solidaridad global y que todos los países, incluso los considerados más ricos, pueden necesitar algún día la ayuda de otros porque, como nos recuerda el Papa Francisco, 'Nadie se salva a si mismo'”.