Los trabajos preparatorios comenzaron hace más de un año, bajo la dirección y supervisión de la Dra. Eva Susa, experta en derecho. Sobre la base de los documentos de la época consultados, la experiencia profesional y las hipótesis avanzadas, la convicción, o al menos la fuerte esperanza, de que el cuerpo del mártir fue enterrado con sus compañeros que compartieron esa trágica muerte en el Nuevo Cementerio Público de Budapest, y más precisamente colocado en el lugar 37, en la segunda fila, en el nicho 301.
Stefano Sándor, Salesiano Coadjutor, fue sentenciado a muerte tras falsos juicios y enterrado en una tumba sin marcar. Antes de su beatificación en 2013, la Congregación Salesiana intentó recuperar el cuerpo del mártir. El estudio histórico-archivístico de la Dra. B. Varga Judit, si bien no logró un resultado definitivo, contribuyó en gran parte al trabajo actual.
El 12 de noviembre de 2018, en presencia de estudiosos y profesionales experimentados, se abrió la tumba de donde se extrajeron los huesos de seis esqueletos completos.
El estudio antropológico realizado sobre los huesos se realizó en el Laboratorio de Antropología del NSZKK (Centro Nacional de Expertos e Investigación). El material genético perteneciente al Mártir fue extraído de un sobre que había sido sellado personalmente por el Beato Sándor y de un sello utilizado por su hermano. El análisis de ADN fue realizado por la Dra. Eszter Dudas.
“Al término de estas pruebas, realizadas bajo un estricto control especializado, nos complace anunciar que, tanto desde el punto de vista jurídico como forense, entre los restos de los seis sujetos encontrados hemos podido identificar los del Beato Stefano Sándor, mártir salesiano”, dijo con profunda satisfacción el P. Pierluigi Cameroni, Postulador General de las Causas de los Santos de la Familia Salesiana.
Posteriormente, según las indicaciones de la Santa Sede, se informará sobre la autenticación, la conservación de las reliquias y las celebraciones religiosas.
La Familia Salesiana agradece a todos los que han participado, colaborado y hecho posible el proceso de recuperación e identificación.