En su informe anual, relativo a los datos de 2017, ISTAT informó que son 5,6 millones de personas en pobreza absoluta. Un promedio de 8,4% de la población nacional, y un aumento con respecto al año anterior de +0.5%. Otra cifra significativa es la incidencia de la pobreza absoluta entre los menores, equivalente al 12.1% del total: esto significa el 1.2 millones de menores vive en pobreza absoluta.
La llamada “pobreza relativa” está creciendo, esa es la condición de la pobreza en relación con la sociedad circundante, porque involucra a alrededor de 9,4 millones de personas, pasando del 14% al 15,6% en un año.
Los datos también revelan otros aspectos preocupantes:
- que la pobreza afecta en particular a las familias más jóvenes, en comparación con aquellas en las que el adulto de referencia es mayor de 65 años e incluso puede contar con la protección de una pensión estable;
- que tener hijos en Italia es el camino para acercarse a la pobreza, y que en presencia de “numerosas” familias, con tres o más hijos, la pobreza es una realidad concreta para una de cada cinco familias;
- que la brecha entre el Centro-Norte de la península y el Sur continúa existiendo a lo largo de los años, en detrimento de este último;
- y que la pobreza afecta cada vez con más frecuencia a las personas que ya se encuentran en condiciones de fragilidad: desempleados, familias de inmigrantes, personas con bajas calificaciones educativas.
En este contexto, en el país donde nació Don Bosco, los Salesianos renuevan su compromiso de apoyar a los necesitados.
Solo para citar algunos datos alentadores podemos recordar que “Salesiani per i social Federación SCS/CNOS”, la institución civil que trabaja activamente en el sector de la pobreza a través de las iniciativas de sensibilización y solidaridad en Italia, anima todo el territorio nacional:
- 33 hogares familia;
- 10 grupos de apartamentos para jóvenes que necesitan acompañamiento;
- 7 comunidades para combatir la adicción;
- 6 centros para acomodar a las madres en dificultad;
- 4 estructuras de vivienda social para acoger a los más necesitados;
- 3 comedores para alimentar a los necesitados;
- 18 residencias y 3 oficinas de información para migrantes;
- 27 servicios para búsqueda de trabajo.
Porque la pobreza no debe ser una condición sin una vía de salida.