El programa ‘Girl Os’ (refugio de niñas) es uno de los nueve programas que atienden los Salesianos de Don Bosco Fambul en Sierra Leona. Está destinado a acoger, dar seguridad y educación a menores que han sufrido abusos en el ámbito familiar y seguir los procesos judiciales contra los abusadores. Con la participación y colaboración en el proyecto de Misiones Salesianas y de Jóvenes y Desarrollo, el objetivo último es la reintegración de estas menores en un ambiente familiar seguro y un seguimiento de cada una para asegurarse de que continúan su formación académica.
Un domingo cualquiera, a las dos de la tarde, las 34 chicas que en la actualidad forman parte del programa ‘Girls Os’ de Don Bosco Fambul se entretienen viendo la televisión, peinándose unas otras o descansando en las habitaciones. Han comido un par de horas antes y están levantadas desde primera hora de la mañana, ya que todas, impecablemente vestidas, van a misa a la parroquia de San Agustín.
A las dos de la tarde, según del director de Don Bosco Fambul, el salesiano Jorge Crisafulli, un cortocircuito que comenzó en los cables que hay por encima del techo se convirtió en un incendio y arrasó todo lo que hay en la casa, a menos de 100 metros de Fambul, en cuestión de minutos: “Las chicas salieron corriendo pero apenas se pudo salvar nada; se ha perdido todo: colchones, ropa, la cocina, los ordenadores, archivos, la televisión…”.
Con la ayuda de los trabajadores sociales y de los propios salesianos rápidamente tranquilizaron a las chicas y las pusieron a salvo. Sin embargo, una de ellas, que estaba dormida, no pudo salir por la virulencia del fuego y se refugió en una de las últimas habitaciones de la casa. “Cuando oímos sus gritos y vimos sus brazos asomados por las rejas de la habitación hemos logrado llegar a ella con una escalera larga de Don Bosco Fambul y hemos roto a golpes el enrejado para poderla rescatar”. La menor, de nombre María, ha sido la única herida por inhalación de humo y se ha quemado los pies, aunque sus heridas no revisten gravedad.
“Se ha perdido todo, pero lo importante es que las niñas se han salvado y vamos a salir adelante como siempre lo hacemos. Creo que ha sido un milagro de María Auxiliadora que esta niña se salvara, así que de nuevo vamos a necesitar la ayuda de todos para volver a darles un hogar a estas niñas”.
Don Bosco Fambul volvió a convertir ayer sus patios en una gran sala multiusos improvisada y diversas estancias de la obra salesiana en Freetown se prepararon para acoger los colchones en los que las niñas pasaron su primera noche. “Será duro al principio, pero a estas niñas no les faltará de nada gracias a la solidaridad de todos”, aseguran los Salesianos de Don Bosco Fambul.