Don Chávez conoció a los Hijos de Don Bosco desde joven, asistiendo a la escuela salesiana y sintiendo de inmediato el encanto de Don Bosco. Después de completar los estudios de formación inicial y ser ordenado sacerdote en 1973, fue enviado a Roma, donde obtuvo la licenciatura en Sagrada Escritura en el Biblicum en 1977, para luego regresar a su país natal para enseñar en el Teologado de Guadalajara.
Desempeñó funciones como Director y fue Inspector de Guadalajara de 1989 a 1994. También fue Consejero Regional para la Región Interamérica, cargo que le fue comunicado durante el CG24 en 1996, en España, donde estaba concluyendo sus estudios de Sagrada Escritura para su doctorado, mediante una llamada telefónica de Don Vecchi.
Después de un mandato como Consejero Regional, cumplió dos períodos como Rector Mayor, siendo reconfirmado en el CG26 de 2008.
Al igual que con el programa general de su Rectorado, Don Chávez "volvió a Don Bosco" en sus Aguinaldos. "Para Don Bosco, el Aguinaldo tenía un significado muy preciso: era el regalo de una propuesta que sirviera como estímulo en el camino formativo y en el crecimiento espiritual de sus jóvenes, y que también se convirtiera en una orientación para toda la comunidad", escribió en su primer Aguinaldo, el de 2003. Y así fue como él lo interpretó y desarrolló.
Al mismo tiempo, en sus doce Aguinaldos, Don Chávez supo darles un impulso nuevo, un sentido más amplio y pastoral, y valorizó la dimensión de instrumento de animación para toda la Familia Salesiana. Por esta razón, el Aguinaldo a menudo está en comunión y continuidad con los Capítulos Generales celebrados: es una aplicación y concreción de los mismos.
Sus primeros Aguinaldos trataron sobre temas como la emergencia educativa, la santidad juvenil, el compromiso por la familia, la promoción de la vida, la preferencia por los pobres, la solidaridad globalizada, la nueva evangelización y la caridad ardiente y operativa.
Y a menudo están en sintonía con los tiempos de la Iglesia y la Congregación, como el post-Jubileo, el CG25º, el 150º aniversario de la muerte de Mamá Margarita, el 40º aniversario de la conclusión del Concilio Vaticano II, el 50º aniversario de la canonización de Domingo Savio, el Centenario de la muerte de Don Rúa y, como camino de preparación, el Bicentenario del nacimiento de Don Bosco.
En cuanto a la estructura, dada también su formación, la formulación casi siempre tiene una referencia bíblica, eclesial o salesiana. Son simples y breves, pero muy ricas en contenido y prácticas al ponerlas en práctica. Y el comentario que las acompaña termina, a menudo, con un relato, una fábula, una anécdota, un poema o una oración.
Además, desde 2006, para una mejor interpretación y actualización, el Aguinaldo viene acompañado de uno o más DVD que sirven como guía para profundizar en el tema del Aguinaldo: una verdadera guía para la lectura y estudio del comentario del Rector Mayor sobre el Aguinaldo.
No faltan Aguinaldos dedicados a los jóvenes: a su educación, al compromiso por la santidad; a la familia; a la evangelización. Y muchos otros temas que están presentes junto con otros temas principales.
En general, no es exagerado decir que es con Don Chávez que el Aguinaldo ha adquirido un valor importante no solo porque es para todos los grupos de la Familia Salesiana dispersos por el mundo, sino principalmente porque se ha convertido en un verdadero proyecto, un programa de vida educativo, espiritual y pastoral para toda la Congregación, con propuestas pastorales, indicaciones y sugerencias prácticas para implementar el Aguinaldo.
A continuación, se presentan los doce Aguinaldos entregados por Don Chávez:
2003: La casa y la escuela de la comunión;
2004: Ofrecemos a todos los jóvenes la alegría y el compromiso de la santidad;
2005: Rejuvenecer el rostro de la Iglesia, que es la Madre de nuestra fe;
2006: Asegurar una atención especial a la familia;
2007: Por una verdadera cultura de la vida humana;
2008: Eduquemos con el corazón de Don Bosco;
2009: Comprometámonos a hacer de la Familia Salesiana un amplio movimiento de personas para la salvación de los jóvenes;
2010: Imitando a Don Rúa, como discípulos auténticos y apóstoles apasionados, llevamos el Evangelio a los jóvenes;
2011: Ven y verás;
2012: Conociendo e imitando a Don Bosco, hagamos de los jóvenes la misión de nuestra vida;
2013: “Alegraos siempre en el Señor; os lo repito, alegraos” (Fil. 4,4). Como educadores al estilo de Don Bosco, ofrezcamos a los jóvenes el Evangelio de la alegría a través de la pedagogía de la bondad;
2014: “Da mihi animas, cetera tolle”. Acudamos a la experiencia espiritual de Don Bosco para caminar en la santidad según nuestra específica vocación. “La gloria de Dios y la salvación de las almas”.