Desde febrero, las tardes de los viernes y las mañanas de los sábados se dedican al espectáculo, que se presentará en el Auditorio del Casino de Lisboa, ante cientos de personas. Desde mediados de julio, los ensayos son diarios. Exigentes.
Clara Martínez, de veintiún años, dirige al grupo en el calentamiento y la vocalización. Tiene el título de secundaria de canto por el Conservatorio, baila en competición desde hace varios años, fue miembro del coro infantil de la Universidad de Lisboa, tiene una banda de jazz, estudia Ciencias de la Comunicación, pero sigue muy centrada en las clases de baile y canto. Cuando se abrieron las audiciones para el musical, se apuntó.
Ana de Morais se encarga de la dirección artística. Conocida como Bibi, ajusta la coreografía, la escenografía, el vestuario y orienta sobre la colocación de las voces. Profesora de danza y teatro, es responsable de la dirección artística.
En unos noventa minutos, se cuenta la historia de San Juan Bosco, fundador de la obra salesiana, 'Padre y Maestro de la Juventud' y patrón de la JMJ Lisboa 2023. La historia de un sacerdote que dedicó su vida a los jóvenes huérfanos y desfavorecidos, desde el sueño que tuvo de niño hasta su realización en forma de Familia Salesiana.
"Cuando supimos que la JMJ se celebraría en Portugal, fue natural incluir este musical en nuestras propuestas para el Festival de la Juventud", afirma el director musical Luís Carlos Peleira, profesor del Centro Musical Salesiano de Lisboa. "El Don Bosco es uno de los patrones de la JMJ y este es nuestro homenaje como grupo salesiano".
Habrá treinta y un actores en escena. Son alumnos de Teatro Musical del 'Musicentro' de Lisboa, exalumnos y jóvenes que se han presentado a las audiciones, con experiencia en danza, canto y teatro. También participan once bailarines de la Escuela de Danza "Ana Mangericão". El reparto cuenta también con la participación especial de la actriz Maria Curado Ribeiro, nieta de Curado Ribeiro e hija de Rita Curado Ribeiro, ambas actrices de teatro, cine y televisión.
Paulo Peleira tiene diecinueve años y lleva diez participando en todos los espectáculos del Teatro Musical Salesiano de Lisboa. Es hijo de Ana de Morais y Luís Carlos Peleira, y es Exalumno. Asiste a cursos de danza y teatro musical, y de formación musical, armonía y bajo eléctrico en Musicentro. Paulo ha crecido con el carisma salesiano a su alrededor. Espera que el musical y la historia de San Juan Bosco lleguen al corazón de todos. "Vamos a representar al fundador de los salesianos, que debe mostrarse al mundo entero", dice.
Carolina Berlín ya tiene mucha experiencia en espectáculos de 'Musicentro'. En este musical interpreta el papel de Margarita Occhiena, la madre de Don Bosco y figura maternal para los jóvenes que acogió en el Oratorio de Valdocco. Tiene veintiséis años, prácticamente la edad que tenía Mamá Margherita cuando enviudó. "Encontrarse en una situación de pobreza, tener que cuidar de tres hijos, de una suegra anciana y muy enferma y gestionarlo todo con amabilidad, con alegría, con dureza, pero con firmeza. Creo que yo nunca podría hacerlo". Carolina dice que es una inspiración. "Más tarde, eligió ayudar a Don Bosco en su obra. Cuando pudo dejarse cuidar por otros, eligió cuidar a cientos de niños. El sufrimiento no le era ajeno, el cansancio no le era ajeno, la pobreza no le era ajena. Y sabía la importancia de hacer lo que había que hacer", resume.
João Baptista, de treinta y tres años, interpretará al protagonista, San Juan Bosco. Fue alumno del Musicentro de Lisboa y ya ha participado en otros musicales presentados por la escuela. João tiene que administrar su tiempo a rajatabla: el joven médico divide estos días su tiempo entre la paternidad - fue padre hace aproximadamente un año - el trabajo y los ensayos. "Pero es por diversión", dice sonriendo.
Ya lo he comentado durante los ensayos -explica-. Creo que debemos verlo como una misión importante. Vivimos tiempos muy complicados, donde todo lo que vemos es muy cruel, muy difícil, y es difícil encontrar cosas que nos den esperanza". Por eso piensa que todo el mundo debería ver este musical. "La gente necesita ver amor, necesita amor", subraya.
Para él, el Don Bosco fue "ante todo un hombre de fe. Era un hombre de amor, un hombre gentil, muy testarudo, muy tenaz. Fue un regalo de Dios". João recuerda su impresión del viaje que hizo hace unos años a los lugares del Don Bosco en Turín. "Fue una experiencia inolvidable entrar en aquel primer oratorio".
Clara cree que el público saldrá del auditorio "con material para reflexionar". "También será un musical, muy bonito, muy animado, divertido, pero el mensaje siempre es relevante: siempre se puede luchar por el bien, y no hace falta mucho. Que todo el mundo puede unirse por el bien común".
El tamaño y la importancia del evento pueden provocar nerviosismo en los jóvenes actores. "Hasta ahora no hay nerviosismo, solo siento mucha responsabilidad. Sé que la sentiré. Es parte del juego", dice João.
"Todos hicimos un buen trabajo y estamos emocionados por compartir esta historia", dice Carolina.
Todo irá bien", asegura Bibi. "Siempre sale bien. El Don Bosco siempre nos ayuda".
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