"La presencia de todos los Consejos Provinciales para ser fermento en el territorio testimonia la participación activa de una opción vocacional y laical de compromiso", dijo el Consejero Mundial Italo Canaletti.
Animó las jornadas el Prof. Lorenzo Biagi, del Instituto Universitario Salesiano de Venecia (IUSVE), que trazó un camino para los Salesianos Cooperadores: mujeres y hombres que llevan su vocación a la sociedad y, a través del encuentro con el Señor, como sugirió otro ponente, el Padre Paolo Bolognani, se convierten en fermento en la Iglesia.
Durante los tres días, hubo espacio para reunirse con las personas de contacto de los sectores de animación, continuando un camino que comenzó con el taller de formación en Florencia en 2019. Los sectores, en las Provincias, son presencias activas en el territorio, apoyando la animación de los Consejos Provinciales en las dimensiones familiar, juvenil, sociopolítica y comunicativa.
Es significativo el testimonio de Pier Mario Riva, Salesiano Cooperador y uno de los muchachos de Attilio Giordani. Una figura como la de Giordani, Siervo de Dios, debe ser referencia y brújula para orientarnos en el mundo como laicos comprometidos. En el patio de la casa de Monteortone, los Salesianos Cooperadores de la Inspectoría de Lombardía montaron una exposición fotográfica para narrar la extraordinaria vida de Attilio Giordani.
El tema del taller fue la levadura, recordatorio también del Aguinaldo del Rector Mayor. Analizando lo que se compartió durante los tres días del taller, el Consejero Mundial Italo Canaletti resumió el camino que hay que emprender ahora: "Aprovechemos el momento para dar vida a estos días a todos los Salesianos Cooperadores, para responder como Pedro y Juan, fortalecidos por la experiencia de Cristo: 'No podemos callar lo que hemos visto y oído'. Pero no solo eso, sino que hacen suya la invitación del Señor: 'Id por todo el mundo y proclamad el Evangelio a toda criatura', como nos ha recordado el Padre Igino Biffi en su homilía. Busquémonos, encontrémonos y démonos, a través de la resignificación a ser levadura, indicada por Sor Elena Cavaliere en las 'buenas noches salesianas': Dios al hombre, el hombre a Dios, el hombre a sí mismo, el hombre al otro hombre, para evangelizar la religión, la cultura-pensamiento y el lenguaje, las relaciones, la social-ciudadanía-legalidad y la responsabilidad civil. Todo esto es el sentido de nuestro compromiso con la Asociación Salesiana de Cooperadores'.
Por último, Canaletti concluye: '''Acompañados para acompañar': esta exhortación del padre Stefano Pastorino al inicio de las jornadas a todos los participantes nos sostuvo en nuestro trabajo. Volvemos a casa conscientes de los dones recibidos, atesorando estas palabras y el gesto con el que concluyó la Celebración Eucarística: queremos, como Don Bosco, ser 'brazos abiertos' que acogen y acompañan a todos los que encontramos en nuestro camino''.