La educación constituye uno de los principales compromisos de la Iglesia católica que, no solo se expresa en la acción catequética más directamente vinculada a la formación de la fe personal, sino también en las diversas formas de educación formal promovidas por las escuelas y universidades católicas, la pastoral escolar y la enseñanza religiosa escolar. Además, la educación formal -desde la infancia hasta la universidad- nunca es neutra, precisamente porque es una forma particular de educación en la que las actitudes y los valores personales se transmiten inevitablemente junto con los contenidos. Por eso, el proyecto educativo de una escuela o universidad católica constituye el trasfondo ineludible sobre el que se ha de situar la cultura instrumental o especializada que se inspira en esa perspectiva cristiana.
El Magisterio católico se ha pronunciado varias veces sobre el tema en un gran número de documentos oficiales e intervenciones ocasionales; incluso el Derecho canónico regula de diversas maneras las iniciativas educativas promovidas por la Iglesia. En medio de todas estas fuentes puede resultar difícil orientarse, sin perjuicio, de la relevancia de la educación, para la que el Concilio utilizó el título de gravissimum momentum (tema de extrema importancia), mientras que los Papas más recientes han hecho sonar alarmas aún más dramáticas, desde la emergencia educativa sentida por Benedicto XVI hasta la catástrofe educativa denunciada por el Papa Francisco.
En un contexto tan significativo y articulado, es, por lo tanto, bienvenida y oportuna la publicación de un libro que recoja una síntesis ordenada de la producción magisterial de la Iglesia universal sobre el tema educativo. Los autores son el padre Cesare Bissoli, Sergio Cicatelli, el padre Guglielmo Malizia y el padre Carlo Nanni, competentes profesores de la Universidad Pontificia Salesiana.
En capítulos separados, se presenta la misión educativa de la Iglesia, la condición de las escuelas católicas, la enseñanza de la religión, el papel de las universidades católicas (en las ciencias teológicas y profanas) y algunas perspectivas sobre la pastoral escolar y universitaria.
El enfoque es esencialmente institucional, apoyándose exclusivamente en el Derecho canónico y en las diversas fuentes del Magisterio católico (documentos del Concilio y de las Congregaciones vaticanas, pronunciamientos de los papas), en un horizonte sistemáticamente mundial y nunca referido a condiciones geográficas particulares. El debate científico, cultural y político sobre el tema queda excluido, pero el mérito de esta elección metodológica es que ofrece un panorama de autoridad incuestionable, a partir del cual se pueden desarrollar ulteriores reflexiones y posiciones correctamente fundamentadas. El horizonte temporal abarca desde el Vaticano II hasta las intervenciones más recientes del Papa Francisco, lo que garantiza una visión suficientemente completa a pesar de la brevedad de la exposición.
Los autores son cuatro profesores de la Pontificia Universidad Salesiana de Roma, con competencias diferentes, pero unidos por una única perspectiva compartida: el Padre Cesare Bissoli, hijo Sergio Cicatelli, el Padre Guglielmo Malizia y también el ex rector Carlo Nanni, cuya muerte en 2020 interrumpió temporalmente el proyecto del volumen, pero amigos y colegas han querido fielmente retomarlo y llevarlo a término, para ofrecer al público un instrumento de trabajo práctico y actualizado.
Por ello, el texto puede ser especialmente útil para todos los agentes de la educación formal, dentro y fuera de la Iglesia: educadores, profesores, alumnos, pastores, responsables de sector, padres. Particularmente para los 3.300 centros salesianos de todo el mundo, con sus 6.900 salesianos y 52.000 laicos. Esto se debe a que la Escuela Salesiana es una escuela evangelizadora, una propuesta para encarnar el Evangelio en los centros educativos.
"Esta publicación pretende ser un instrumento para la reflexión, el análisis de las características de cada centro salesiano concreto y la definición de objetivos de acuerdo con su Proyecto Educativo-Pastoral. Requiere una lectura profunda y el diálogo con las personas implicadas en la acción educativo-pastoral", expresa el Padre Miguel Ángel García, Consejero de Pastoral Juvenil.
Y concluye: "La evangelización es, para los Salesianos, una dimensión constitutiva de la misión, y la educación es la mediación fundamental que tiene lugar particularmente en el ámbito escolar. La evangelización propone a la educación un modelo de humanismo inspirado en el Evangelio, y la educación sostiene y acompaña el proceso de evangelización, abriendo el corazón de los niños, de los adolescentes y de los jóvenes a la verdad, a la belleza, a la compasión y al sentido de la vida".
