La carta continúa:
"Sudán cuenta con tres presencias salesianas que tienen más de treinta años. Son: 1) El Centro de Formación Profesional 'San José', situado en la zona industrial de Jartum, con más de quinientos estudiantes. 2) La parroquia de San José, situada a unos veintisiete kilómetros al sur de Jartum, con más de 6 mil fieles. 3) El centro de formación profesional "Don Bosco" de El Obeid, a unos quinientos kilómetros de Jartum, con más de cuatrocientos alumnos.
Ante el estupor de todos, el sábado 15 de abril, día laborable para el Centro de Formación Profesional (CFP), se oyeron disparos de artillería en Jartum. El CFP está situado a unos cinco kilómetros del Aeropuerto Internacional de Jartum, a unos cuatro kilómetros del Palacio Presidencial y a unos tres kilómetros de una de las bases de las Fuerzas de Apoyo Rápido, fuerzas paramilitares. Los estudiantes y el personal de la PPC fueron enviados inmediatamente a casa, aunque algunos solo pudieron regresar al día siguiente.
El conflicto enfrenta a las Fuerzas Armadas de Sudán (SAF, en inglés), dirigidas por el actual presidente Abdel Fattah al-Burhan, y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, en inglés), dirigidas por el comandante Mohamed Hamdan Dagalo, ambos aliados hasta hace poco. Ambos trabajaron juntos para destituir al expresidente sudanés Omar al-Bashir en 2019 y desempeñaron un papel importante en el golpe militar de 2021. Las tensiones surgieron durante las negociaciones para integrar las RSF en las fuerzas armadas del país, como parte de los planes para restaurar el gobierno civil. El dilema era quién estaría subordinado a quién en la nueva jerarquía. Así comenzó una lucha por el dominio que maduró hasta convertirse en una guerra a gran escala entre ambos bandos. Ya han pasado doce días desde que comenzaron los combates y no está claro dónde y cuándo terminarán. Ambos grupos están bien armados y cuentan con combatientes experimentados.
Debido a los doce días de enfrentamientos, muchas zonas de Jartum están sin electricidad ni agua. Las tiendas y los mercados están cerrados y las carreteras desiertas. El sufrido pueblo sudanés reza para que prevalezca el sentido común en las dos partes enfrentadas, de modo que su antigua aspiración a una paz y seguridad duraderas pueda empujar a los líderes de las partes enfrentadas a sentarse juntos y negociar para poner fin a las hostilidades y allanar el camino hacia una paz duradera en el país.
El CFP "San José", al estar demasiado cerca de la zona de conflicto, sufre mucho más que las otras dos comunidades salesianas. Los hermanos de esta presencia salesiana han permanecido en el instituto a pesar de los ruidos de tiroteos y explosiones a gran escala. Si la situación se vuelve peligrosa para la vida, los hermanos de esta presencia planean trasladarse a una de las otras comunidades salesianas de Sudán".