Siguió un nuevo desarrollo, con la recolección de botellas de bebidas usadas y bidones de plástico. Pero considerando que la comunidad rara vez consume agua embotellada, se ha utilizado otro método: pedir a personas externas que traigan sus botellas usadas a la comunidad. Estos son los feligreses y fieles que participan en la celebración eucarística todos los domingos en la capilla de la comunidad. Y la invitación que se les dirigió resultó ser muy efectiva.
En agosto de 2021, la comunidad salesiana se reunió a través de WhatsApp con el Sr. Angga Rizyan, coordinador del "Plastic Bank Indonesia", una organización privada que colabora en la promoción de la Laudato Si' a través de la recolección y reciclaje de plástico y su transformación en fondos sociales para comunidades.
En un encuentro online a través de Google Meet se habló de los residuos, en especial de los plásticos que, especialmente en el caso de las botellas, son bastante difíciles de descomponer, por lo que deben ser recogidos y tratados correctamente. Después de este encuentro, los salesianos de la comunidad y el “Plastic Bank Indonesia” firmaron un convenio de cooperación para la gestión de residuos de botellas plásticas.
Desde entonces, la comunidad salesiana y la población circundante han comenzado a recolectar botellas de plástico de manera regular.
Se construyó un almacén de botellas plásticas y no plásticas y se encomendó a dos salesianos la tarea de acomodar las botellas plásticas existentes, para colocarlas en el espacio previsto. Quitan las tapas de las botellas, separan las etiquetas de plástico de las botellas y las aplanan para poder colocarlas en una gran cantidad de bolsas. Si hay muchas botellas, toda la comunidad trabaja junta. Gracias a esta labor ya se han entregado en dos ocasiones un buen número de botellas de plástico al equipo de Plastic Bank. En la primera etapa lograron recolectar 216 kg de botellas plásticas. En la segunda fase, 385 kg de botellas, pero también bidones y latas.
A partir de esta experiencia, el salesiano coadjutor Bernardinus Mei, SDB, testimonia: “Se ha creado conciencia en la recolección de botellas de plástico, y quien las recolecta habitualmente participa también en la protección de su propio jardín y del medio ambiente. Si todos tuviéramos la misma conciencia, poco a poco todos seríamos capaces de proteger el medio ambiente, mantenerlo limpio y evitar la contaminación plástica en los océanos. Los desechos de botellas de plástico no se pueden descomponer, por lo tanto, deben recolectarse y procesarse en nuevos materiales. Y de esta manera las botellas de plástico usadas se han convertido en una bendición”.
