En el grupo católico del campamento había cinco jóvenes salesianos de la comunidad de posnoviciado "Don Bosco Wisma": Wilfridus Pita Raja, Arnoldus Yanur Bate Gope, Ambrosius Otu, Anselianus Agung Sife y Fabianus Karo.
El campo interreligioso está motivado por el pluralismo religioso, cultural, étnico, racial y lingüístico de Indonesia, una diversidad que representa una contribución única al mundo; y el comité YIPC se mueve con esta visión, sembrando las semillas de la paz y la unidad en la diversidad.
El programa de tres días ayudó a los participantes a conocerse mejor y a dejar de lado los estereotipos basados en la ignorancia sobre las otras religiones.
La primera parte del campamento fue una invitación a conocerte a si mismos, debilidades y fortalezas y aprender a aceptarse como uno es, aceptando también el pasado, para poder vivir en paz también con los demás.
Fue una oportunidad para profundizar en la perspectiva del conflicto entre musulmanes y cristianos en el país, visto que los miembros de estas religiones a veces entran en conflicto. “Podemos ver iglesias y mezquitas en llamas o ser testigos de la prohibición de construir lugares de culto por parte de la población mayoritaria en algunos rincones de Indonesia. Es la realidad de nuestro país multirreligioso”, dijo el postnovicio salesiano Fabianus Karo. Sin embargo, Gerald, uno de los miembros del comité de YIPC, recordó: "Debemos partir de esta sala del YIPC para querernos y respetarnos".
El segundo día estuvo dedicado a la reflexión sobre el espíritu de la Laudato Si'. Se exploraron las causas y factores que contribuyen a la destrucción de la creación, el calentamiento global, la contaminación. Se trató de encontrar la forma de sanar nuestra Casa Común haciendo cada uno su pequeña contribución, lo que significa hacer la paz con la Madre Tierra.
El último día se abordó la relación personal con Dios, cada uno pudo tomar conciencia de sus pecados y faltas a los ojos de Dios, para regenerarse a través de su propia conversión. El espíritu de arrepentimiento se materializó en tres acciones: Hacer PARA, Hacer CON y Hacer A TRAVÉS de Dios.
El campamento terminó con el perdón mutuo como símbolo de paz y reconciliación y el comienzo de una nueva era de Paz y Unidad, recordando que Mahatma Gandhi dijo: “La violencia es el arma de los débiles”.
“Estamos firmemente convencidos de un dicho popular en nuestras partes, que dice: 'No hay paz sin reconciliación'. La paz es algo que se concreta cuando la reconciliación se lleva a cabo en el corazón de cada persona. La paz y la reconciliación son inseparables… Para lograr esto necesitamos comprender y amar a nuestro prójimo. El YIPC de Yakarta ha dado la oportunidad de contribuir a la paz a través de la reconciliación, facilitando el encuentro entre jóvenes de diferentes religiones, y se fundamenta en dos pilares: la educación para la paz y el diálogo interreligioso basado en el Corán y la Biblia. Esperamos que en el futuro más jóvenes participen en esta importante iniciativa. ¡Bienaventurados los constructores de la Paz!”.