La ceremonia inaugural comenzó en la parroquia de “Santa Maria della Speranza” con la Celebración Eucarística -presidida por el padre Ángel- quien en su homilía ofreció importantes elementos de reflexión.

Así, invitó a plantearse: “En mi actividad como docente o como alumno, ¿desde qué posición interior miro y estudio la realidad? ¿En qué actitudes profundas se enraízan mis investigaciones y mis pensamientos? ¿Qué intenciones lo guían y qué energías lo alimentan?”. En otras palabras, recordando las enseñanzas de las Lecturas, “¿pienso como un hombre psychicós o me dejo guiar por el Espíritu?”.

Las mujeres y los hombres que se ocupan de la cultura y el conocimiento no deben reducirse a un "hombre psychicós", es decir, "que vive según su propia psiquis y se mueve dentro de los límites de lo que le es natural", sino que deben seguir otro modelo de hombre, lo que San Pablo define como "hombre pneumaticós": aquella persona que "se deja llevar por el Espíritu para descubrir un horizonte nuevo, diferente e inimaginable, que se deja guiar por el Espíritu, compartiendo la mirada que Jesús tiene sobre la vida, en su lógica, en su mentalidad, en su forma de pensar”.

La mañana continuó con el Acto Académico y el Informe del Rector de la UPS, el sacerdote y Prof. Andrea Bozzolo, quien recordó algunos momentos importantes del encuentro del año anterior. Entre ellos la atención continua a la investigación y la docencia, la mejora de las relaciones externas, los nuevos convenios interuniversitarios, el relanzamiento de la editorial universitaria LAS y de la Universidad Pastoral.

Indicó también que sigue mejorando el área de estructuras y servicios, aunque el proceso más relevante para la vida de la Universidad fue sin duda el trabajo de elaboración y redacción del Proyecto Estratégico 2022-2027. Dicho estudio quiere mirar los desafíos que caracterizan la era actual -injusticias sociales, migraciones, conflictos, el dominio de la tecnología sobre la ética, cuestiones antropológicas radicales, sensibilidad por el medio ambiente, por el diálogo entre religiones, por la búsqueda de la paz- para asegurar que la labor cultural de la UPS “esté fuertemente anclada a la realidad y cada vez más abierta a una dimensión internacional”.

Al final del Informe, el Rector Bozzolo introdujo el tema que acompañará a la UPS: “Repensar el pensamiento. Escucha del Espíritu y entrelazamiento de saberes”, que fue profundizado en la prolusión académica por Mons. Piero Coda, Secretario General de la Comisión Teológica Internacional.

En su discurso, Mons. Coda subrayó el "papel estratégico" de la Universidad en el contexto actual, "llamada a ofrecer una verdadera hermenéutica evangélica para comprender mejor la vida, el mundo, los hombres, no una síntesis sino un clima espiritual de investigación y certeza a partir de las verdades de la razón y la fe". De ahí la invitación de "Veritatis gaudium" a reformar los planes de estudio y el método de enseñanza e investigación en la Universidad, según dos criterios básicos: el diálogo entre los saberes y la transdisciplinariedad.

Tal "práctica sinodal de vida universitaria -como la definió Mons. Coda- necesita la contribución específica de los jóvenes. Porque, enseña Don Bosco, la educación ha de expresarse en una comunión de vida y de pensamiento entre maestros y alumnos, como experiencia de reciprocidad feliz y libre en la escuela del único Maestro”.

Al final de sus palabras, el Gran Canciller entregó las Medallas Universitarias a los estudiantes que se graduaron con la máxima calificación, a un docente y a un empleado que se distinguieron por su fiel y constante servicio a la UPS.

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