Desde noviembre, esta región se ha visto sumida en un conflicto entre el gobierno federal etíope y el Frente de Liberación del Pueblo de Tigray (TPLF). La zona, situada a 700 kilómetros al norte de la capital, Addis Abeba, que cuenta con 6 millones de habitantes y tiene cuatro obras salesianas (Macallè, Adigrat, Shire y Adua), con un total de 25 salesianos comprometidos en la formación de los jóvenes y brindando acompañamiento a las familias sumergidas por la guerra.
La escasez de combustible, alimentos y recursos en general, después de todo este tiempo, se está volviendo particularmente crítica, incluso para las organizaciones humanitarias de la región. Ante esta situación, la “Fundación Don Bosco - Francia” espera recaudar suficiente dinero para cubrir las necesidades básicas (comida y ropa) durante dos meses, para 300 familias que están en contacto con los centros educativos salesianos.
El segundo llamamiento se refiere a la escuela primaria Sainte-Marie, ubicada en Saint-Geniez-Olt, una ciudad de 2.000 habitantes en Aveyron, en los valles de Lot y Aubrac. Como en muchas escuelas del campo, la situación de esta obra fiel a la pedagogía salesiana, es frágil. Pero podría recuperarse mediante una renovación: el edificio de la escuela, de hecho, está equipado con una estructura que alguna vez sirvió como internado, pero que ahora está cerrado porque necesita arreglos.
A través de la renovación del edificio, la Fundación no solo quiere apoyar las actividades educativas, sino también transformar el antiguo internado en una estructura para la hostelería, destinada a desarrollar una actividad generadora de ingresos a favor de la institución y favorecer así un modelo de mejora de las realidades rurales y del turismo sostenible.