El emotivo reencuentro de la familia tuvo lugar en diciembre, en la casa salesiana para los menores más necesitados "Don Bosco Anbu Illam" (DBAI) en Salem, en presencia de la Directora distrital de protección infantil Uma Maheswari y el padre Casmir Raj, Director de la DBAI, acompañados por otras autoridades locales.
Meganathan había sido retenido por la fuerza, junto con su hermano Sarath Kumar, por hombre poderoso de Sapanipatti, que les obligó a realizar trabajo infantil en su horno de ladrillos. La familia, consternada por el dolor y la culpa, le había rogado al hombre que liberara a los niños, pero este último siempre se había negado.
El niño relató su dramática experiencia en el horno: él y su hermano trabajaron duro allí durante años, en condiciones extremas, hasta que una mujer se interesó por ellos. “Nos preguntó si estábamos interesados en estudiar, cuenta Meganathan, le dije que eso era lo que quería, pero que no podíamos hacer nada más que fabricar ladrillos. Luego, una persona adinerada llamó a la organización Childline y al día siguiente la policía vino a rescatarnos. Fuimos confiados a 'Don Bosco Anbu Illam', donde nos dieron cobijo y una buena educación”, añadió.
Desde entonces, su vida ha cambiado. Sarath Kumar, después de dejar sus estudios, encontró un trabajo como chofer, mientras que Meganathan completó su formación industrial y trabajó durante un período como miembro del personal en DBAI. Fue gracias a un colega que logró volver a ponerse en contacto con sus padres: “Cuando nos volvimos a encontrar, mi madre no podía dejar de llorar”, dijo Meganathan.
Ahora, el siguiente paso será encontrar un trabajo estable que permita a Meganathan mantener a su familia. Salir de la DBAI no fue fácil para él: “Aquí me animaron a estudiar y me dieron todo el apoyo posible”, recordó. Sin embargo, ahora tiene una idea clara de lo que quiere hacer en el futuro: ayudar a las personas necesitadas y brindarles la misma asistencia que recibió de la DBAI.