Entre los varios temas tratados, se destacó que ha mejorado la calidad de la misión salesiana en la Región, el fortalecimiento de los equipos de formadores tanto cualitativa como cuantitativamente, de acuerdo a las orientaciones de la Ratio y de los distintos Curatorios. Los Superiores se comprometieron a promover los talentos de cada religioso, acompañándolos en la consecución de diferentes especializaciones para promover los diversos aspectos de la misión salesiana, siguiendo las huellas de Don Bosco.

También se habló de solidaridad entre las Inspectorías, dado que algunas son más fuertes y otras más débiles. En este sentido se acordó que en el futuro la Región no debería depender sólo de Inspectorías fuertes, sino de una mayor solidaridad, en línea con la generosidad misionera indicada como prioridad por el Rector Mayor.

Las resoluciones de la Asamblea plenaria también establecieron, por primera vez, la figura de un Secretario Permanente a tiempo completo, que contará con el apoyo de una Secretaría. El mandato del secretario incluirá, entre otras cosas, la comunicación, la coordinación de las distintas comisiones, el cuidado de los archivos y la ayuda al Consejero Regional en su sesión plenaria con el Rector Mayor y el Consejo General. Además, Nairobi fue votada como la sede de CIVAM.

Mientras la conferencia CIVAM queda siendo una institución única para toda la región, las Inspectorías comenzarán a organizarse lentamente por zonas pastorales, de cara a la futura creación de varias Conferencias inspectoriales por parte del Rector Mayor.

Un día antes de concluir el encuentro, los Superiores tuvieron la oportunidad de visitar algunas de las obras salesianas más significativas de Nairobi, entre ellas el Centro Profesional "Don Bosco Boys Town"; la obra del "Bosco Boys", que reúne en una sola realidad un proyecto para los niños de la calle; el prenoviciado salesiano; y el Teologado “Don Bosco” de Utume.

En esta última casa, el Consejero Regional y los Superiores tuvieron la oportunidad de interactuar con los jóvenes salesianos en formación de varias Inspectorías y Visitadurías.

Al ofrecer el mensaje de las "buenas noches salesianas" a los muchachos del "Bosco Boys", el padre Owoudou desafió a estos jovenes a creer en sí mismos y les recomendó cultivar y acariciar un importante sueño, siguiendo el ejemplo de “Giovanni Bosco”, un joven como ellos, que tenía un gran sueño y con la ayuda de Dios y María, luchó toda su vida para hacerlo realidad.

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