“El apoyo brindado por 'Misiones Salesianas' nos ha permitido alimentar a los niños vulnerables del jardín de infantes del Centro Don Bosco y fue particularmente importante durante un período como el de la pandemia Covid-19, cuando los niños están en mayor riesgo de desnutrición - explicó el padre Louis Malawa, Director del Centro Don Bosco -. También hemos apoyado a algunas familias que están luchando mucho en este período y debo decir que las donaciones de alimentos y otro tipo de apoyo ofrecido han sido muy apreciadas”.
Rundu es la segunda ciudad más grande de Namibia y está ubicada en la frontera con Angola, Zambia y Botswana, en una zona desértica donde cultivar la tierra no es fácil y por esta razón muchos de los aproximadamente 110 mil habitantes viven en condiciones de pobreza extrema.
El Centro Juvenil Don Bosco en Rundu fue inaugurado en 2002 y ofrece albergue y servicios a jóvenes sin hogar. Allí se ofrecen lecciones de informática a 65 estudiantes, una guardería para 70 niños y cursos educativos para 104 estudiantes que han abandonado la educación formal. Además, más de 80 jóvenes asisten al oratorio diario, que también realiza actividades deportivas.
Verónica, una de las beneficiarias de la donación de alimentos, declaró: “Soy huérfana y la ayuda que recibí realmente fue muy importante para mí. Antes buscaba comida en los contenedores y pedía limosna. Ahora tengo comida y ropa y estoy muy feliz”.
Según el Banco Mundial, Namibia es uno de los nueve países de África considerados de ingresos medianos altos, pero todavía existen desequilibrios de riqueza extremos. La tasa de pobreza de Namibia es del 26,9% y la tasa de desempleo del 29,6%.
Los programas salesianos en Namibia se centran principalmente en la educación, para preparar a los jóvenes a un futuro exitoso. Al mismo tiempo, ejecutan otros programas que ayudan a apoyar a los jóvenes pobres y sus familias a través de la satisfacción de las necesidades básicas de vivienda, nutrición y atención médica.
