La presencia ininterrumpida de los salesianos en Etiopía es desde 1976, cuando los religiosos comenzaron a cuidar de los niños y jóvenes locales, utilizando todos sus recursos humanos, culturales, profesionales y económicos para el bien de la población. Los salesianos estuvieron allí durante la hambruna que azotó a Etiopía en 1983-85 y que provocó un millón de muertos, y están hoy durante la pandemia del Covid-19, como en la hambruna generada por la invasión de langostas y en la emergencia de desnutrición que pone en riesgo las vidas de miles de personas.
Las cuatro misiones de Macallè, Adua, Scirè y Adigrat, ubicadas en la región de Tigray, donde desde hace un año siguen los enfrentamientos entre el Ejército Nacional y el Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF, en inglés), se ocupan de ayudar a miles de niños y jóvenes provenientes de contextos de miseria y con historias de violencia, abuso y desesperación a sus espaldas. Gracias a las donaciones de muchos benefactores, en los últimos años miles de niños han sido hospedados en las casas salesianas y han podido frecuentar jardines de infancia y escuelas primarias salesianas, y muchos niños de la calle han recibido formación profesional.
En 1998, a los religiosos salesianos se unieron los operadores del VIS, una organización no gubernamental fundada en 1986 como expresión del Centro Nacional de Obras Salesianas y que se inspira en el mensaje de San Juan Bosco y su sistema educativo, cuyo primer objetivo es trabajar para construir un desarrollo sostenible y duradero para las poblaciones locales.
En Tigray, como en la región de Gambella o en la "Somali Region" al oriente de Etiopía, en la frontera con Somalia, el VIS está empeñado en suministrar agua potable, mejorar el saneamiento básico y la capacidad de gestión de los recursos hídricos de las comunidades locales, a través de proyectos como “Wash” (Water, Sanitation, Hygiene – Agua, Salud e Higiene), realizado en colaboración con el socio local "Dgmda" (Don Gianmaria Memorial Development Association).
Siguiendo la tradición salesiana, el VIS también participa en el sector de la formación y la educación profesional. Dentro de las escuelas técnicas salesianas de la región de Tigray, así como en Gambella y Addis Abeba, se han activado cursos de artes gráficas y tipográficas (con la creación de la primera escuela gráfica del país), sastrería, preparación de alimentos y catering, carpintería, mecánica, marroquinería y edilicia.
“Para promover la inserción laboral -dijeron los voluntarios de VIS- hemos desarrollado una estrategia, que ya hemos adoptado en Tigray y Addis Abeba, basada en la organización de cursos cortos de acuerdo con el mercado laboral, la promoción del 'autoempleo y la colocación en la empresa a través del apoyo a las alianzas entre público y privado”.
También se realizan actividades de formación en los campamentos de refugiados donde, gracias a la colaboración de la Agencia Italiana de Cooperación al Desarrollo, los salesianos intentaron mejorar las condiciones de vida de los refugiados en las regiones de Gambella y Tigray mediante el fortalecimiento de sus competencias profesionales y la inserción laboral para potenciales migrantes y refugiados eritreos.
En definitiva, la misión de los salesianos y voluntarios del VIS en Etiopía es construir un futuro a medida para los jóvenes y las comunidades más desfavorecidas.
Fuente: Agencia Fides